Las carreteras españolas y las calles de muchas ciudades están abandonadas desde hace años, como consecuencia de la reducción de los presupuestos. Eso ha llevado a que poco a poco se conviertan en verdaderas trampas tanto a la hora de accidentes como simplemente en las averías de los coches.

Pero esto no es algo nuevo. Lleva pasando muchos años y de hecho ocurre incluso en las obras nuevas. Llevo varios días pasando por el túnel de la Avenida de América, en Madrid, el que permite salir desde una zona céntrica hacia la M30 y la carretera de Barcelona.

Es un túnel que supuso más de un año de obras, con el consiguiente caos circulatorio en toda la zona pero que desde el primer después de su inauguración tiene un grave problema con las tapas de las alcantarillas. Fue una gran obra que permite descongestionar mucho el tráfico y ofrecer una salida hacia la M30, por lo que creo que hay que valorarla muy positivamente, como ocurre con el soterramiento de la M30.

Pero volvamos con las alcantarillas. El carril derecho de este “supertúnel” tiene quince o veinte tapas de alcantarilla situadas en el centro, algunas de las cuales suponen un peligro porque están más bajas que el firme y los baches son incómodos y peligrosos.

Lo peor es que no se trata de un problema nuevo, provocado por un reasfaltado o alguna nueva actuación, sino que es un problema desde la puesta en marcha del túnel. En una obra que costó bastantes millones de euros, dejar las tapas de las alcantarillas así es una chapuza inaceptable.

¿Dónde estaba el inspector de obras que debía comprobar la finalización de la misma?. De verdad que no cuesta mucho arreglar un tema así, es solo una cuestión de poner un prolongador o solucionarlo de la manera que sea, pero no dejarlo todo mal, que es lo que acaba pasando con todo en nuestras carreteras.

Exactamente lo mismo ocurre en el túnel de la salida de la Carretera de La Coruña cuando pasa bajo el acceso a la Universidad Complutense. En este caso se trata de las rejillas de la parte derecha de la calzada. Si uno va un poco despistado, en una zona en la que los carriles son más estrechos de lo normal, se puede llevar un susto. Y el problema es el mismo pero en este caso ha sido el reasfaltado el que ha hecho que estas rejillas queden más bajas

Pero hay otras muchas chapuzas mucho más peligrosas, y como ejemplo puede servir la salida del enlace de la carretera de la Coruña hacia la M30. Ahí, solo al que asó la manteca, que decía muy abuelo, se le ocurre una solución como la que hay en la que siempre hay situaciones de peligro.

Llegan dos carriles, pero esos dos carriles se quedan en un solo, simplemente se quitan las rayas del suelo, pero sin que se pierda uno de los carriles, y por la izquierda hay una raya continua de 15 centímetros de ancho. El coche que va por el carril de la izquierda no puede salir a la M30 por culpa de esa raya continua y de los dos coches que llegan juntos allí solo puede pasar uno. Y por si esto fuera poco, además hay una parada de autobús. Es un peligro permanente.

¿Cuántos miles de policías habrán pasado por allí en estos últimos años y cuántos de ellos habrán hecho un informe sobre el peligro que supone esta incorporación? Seguro que uno o ninguno. Quizá con un paro que supera ya los cinco millones de personas se podría institucionalizar un nuevo puesto de trabajo, el de inspector. Pero un puesto que conlleve responsabilidad, hacer informes y luchar de verdad por solucionar las cosas, por pequeñas que sean. No un puesto de 60.000 euros al año con coche oficial y gasolina pagada para que algún amigo se pasee por las calles, que es lo que hacen en general nuestros políticos.

Es difícil conseguir que un fontanero venga a nuestra casa a reparar un grifo, pero si hay que hacer una reforma completa del baño se matan por conseguirlo. Y eso se puede extrapolar a obras oficiales. Si hay que hacer un túnel de 20 millones de euros se pegan todas las grandes empresas y todos los políticos, pero si hay que reparar una alcantarilla peligrosa, ¿a quién le interesa eso, a un concejal, a un empresario, o simplemente a nadie? Así nos va.

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La chapuza de las calles

C. Cancela.- 31/10/2011 (06:00h)

EL CONFIDENCIAL

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HA ENTRADO EN el BLOG/ARCHIVO de VRedondoF. Soy un EMPRESARIO JUBILADO que me limito al ARCHIVO de lo que me voy encontrando "EN LA NUBE" y me parece interesante. Lo intento hacer de una forma ordenada/organizada mediante los blogs gratuitos de Blogger. Utilizo el sistema COPIAR/PEGAR, luego lo archivo. ( Solo lo INTERESANTE según mi criterio). Tengo una serie de familiares/ amigos/ conocidos (yo le llamo "LA PEÑA") que me animan a que se los archive para leerlo ellos después. Los artículos que COPIO Y PEGO EN MI ARCHIVO o RECOPILACIÓN (cada uno que le llame como quiera) , contienen opiniones con las que yo puedo o no, estar de acuerdo. Cuando incorporo MI OPINION, la identifico CLARAMENTE, con la unica pretension de DIFERENCIARLA del articulo original.

Mi correo electronico es vredondof(arroba)gmail.com por si quieres que publique algo o hacer algun comentario.

Es curioso, pero poca gente sabe exactamente cuánto le cuesta cada kilómetro que recorre con su coche. Resulta sencillo aproximarse al coste de combustible y ruedas, pero algo más complicado ir más allá. Pues bien, os presentamos una sencilla aplicación que os dará la respuesta exacta a cambio de unos pocos datos básicos… ¿jugamos?

Lo que el programa pretende es hacer visible lo invisible: que tengamos claro lo que cuesta realmente mover nuestro vehículo para poder hacer una comparativa realista

La herramienta en cuestión se puede descargar en el blog es por Madrid. Es un fichero Excel muy sencillo en el que tendremos que meter el valor del coche, el coste y frecuencia de las revisiones, seguro, garaje, lavados, ruedas… y nos devuelve el coste por kilómetro recorrido.
Lo que el programa pretende es hacer visible lo invisible: que tengamos claro lo que cuesta realmente mover nuestro vehículo para poder hacer una comparativa realista con otras opciones como transporte público o, especialmente, compartir coche. Bajo el lema: “Para ahorrar no restes, divide. Misma dirección, sentido común” el blog madrileño nos anima a dividir los costes de transporte entre más ocupantes que se desplacen con nosotros.

Por supuesto, no he podido resistirme a introducir mis propios datos y tengo la sensación de que más de uno se va a sorprender de lo caro que le sale ir en coche. Para desplazamientos a partir de 5 ó 6 kilómetros es claramente más barato un billete de bus (para un coche medio), con lo que jamás compensaría moverlo para ir solos por ciudad.

Para kilometrajes pequeños, por debajo de 15.000 km/año, las cifras se disparan y el coche se convierte en un lujo del que pocos son conscientes

Si la comparativa se realiza con dos o tres ocupantes, evidentemente el coste pasa a ser la mitad o 1/3 para cada uno, de forma que el billete de autobús vuelve a perder posiciones. Los números que salen dependen fuertemente del coche que tengamos y los kilómetros que hagamos al año, pero a la vista de dos o tres pruebas realistas, es difícil imaginar un coche que cueste menos de 0,15€/km, mientras que el coche medio se situaría más bien hacia los 0,25€/km si hacemos bastantes kilómetros y esperamos una larga duración del mismo.
Para kilometrajes pequeños, por debajo de 15.000 km/año, las cifras se disparan y el coche se convierte en un lujo del que pocos son conscientes. Básicamente estaríamos pagando por la “disponibilidad”, puesto que el uso real digiere muy a duras penas la inversión inicial.

¿Por qué no le echas un vistazo? A lo mejor vendes tu coche mañana o, como mínimo, te planteas compartirlo.
De eso se trata.

Fuente: es por madrid

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